Crear un invernadero con toldos u otro tipo de cerramientos puede ser una solución efectiva y económica para cultivar plantas en diferentes climas y condiciones, teniendo en cuenta que hay que elegir los materiales adecuados.
Es importante considerar las condiciones climáticas locales, las necesidades específicas de las plantas que se cultivarán y el presupuesto disponible. Además, asegúrate de que los materiales utilizados sean duraderos y resistentes a la intemperie para garantizar la protección adecuada de tus plantas.
Para que las plantas se desarrollen adecuadamente tendrás que tener en cuenta:
- Selección del lugar adecuado: busca un área en tu jardín o terraza que reciba una buena cantidad de luz solar durante el día. La orientación ideal sería hacia el sur para maximizar la exposición al sol.
- Medición y planificación: mide el área disponible y decide el tamaño del invernadero que deseas construir con los toldos. Asegúrate de dejar suficiente espacio para que las plantas crezcan y para que puedas moverte cómodamente entre ellas.
- Planifica el riego: si no hay una toma de agua cercana tendrás que instalar una y decidir la manera en que vas a regar las plantas: por goteo, nebulización, por manguera, regadera… dependerá del tamaño y características de las plantas que elijas.
En cuanto a los toldos, tienes varias opciones:
- Toldos de tela permeable: son ideales para áreas donde se necesita protección contra el sol, pero también ventilación. La tela permeable permite que el aire circule, evitando que el calor se acumule demasiado y permitiendo que las plantas respiren adecuadamente.
- Toldos retráctiles: los toldos retráctiles son excelentes para ajustar la cantidad de luz solar que reciben las plantas durante el día. Puedes extenderlos completamente para proteger las plantas del sol intenso o retraerlos parcialmente para permitir más luz cuando sea necesario.
- Cerramientos de vidrio o policarbonato: son ideales para áreas donde se quiere mantener una temperatura constante y proteger las plantas del viento y las inclemencias del tiempo. El vidrio o el policarbonato permiten que pase la luz solar mientras protegen las plantas de los elementos.
- Cerramientos de malla de sombra: estas estructuras proporcionan sombra parcial a las plantas, protegiéndolas de la luz solar directa y del calor excesivo. Son especialmente útiles en climas cálidos y soleados donde se necesita proteger las plantas de la radiación solar intensa.
- Cerramientos de madera o metal con paneles ajustables: estos cerramientos permiten controlar la cantidad de luz solar que llega a las plantas ajustando los paneles según sea necesario. Son versátiles y pueden adaptarse a diferentes condiciones climáticas y necesidades de cultivo.
Cuidado y mantenimiento
- Revisa regularmente los toldos y la estructura de soporte para asegurarte de que estén en buenas condiciones y realiza cualquier reparación necesaria.
- Controla la temperatura y la humedad dentro del invernadero para proporcionar el ambiente óptimo para el crecimiento de las plantas.
- Riega y fertiliza las plantas según sea necesario y protege las plantas de plagas y enfermedades.
Puedes utilizar un pequeño espacio del jardín o, si vives en un piso, puedes habilitar la terraza para disfrutar de tu proyecto de jardinería. Seguro que pasas ratos muy relajantes.
Sea cual sea tu espacio hay una opción a medida de tus necesidades, no dudes en consultarnos.
